Género Sempervivum

Un poco de información sobre el género sempervivum.

Género de plantas de la familia Crassulaceae, con más de 40 especies y cientos de cultivares, su nombre “siempre vivas” ya nos indican que son plantas resistentes que aguantan condiciones muy extremas. Otros nombres por los que son conocidos son: siemprevivas, liveforever, houseleeks, hen and chicks, gallinas y pollitos…

Pueden encontrarse en diversos países de Europa y en nuestra Península Ibérica.

Estas plantas llegan sobrevivir en condiciones muy desfavorables, como claro ejemplo tenemos las Sempervivum tectorum, siemprevivas de los tejados, plantadas antiguamente en los tejados para protegerlos.

Sempervivum tectorum (Arnoldius’07 (CC)

Las sempervivum son plantas suculentas perennes que forman racimos de llamativas rosetas, con  colorido que va desde un fuerte color rojo, hasta colores grisáceos, pasando por verdes intensos, amarillos, naranjas o rojos, lo que las hace muy apreciadas entre los aficionados a las suculentas.

Cada roseta saca rosetas laterales que parten de la parte inferior de la planta o entre sus hojas como en el caso de las sempervivum pertenecientes al grupo “jovibarba” que actualmente ha dejado de ser género independiente y está incluido en el género Sempervivum. También puede reproducirse por semillas.

Las plantas tardan unos años en florecer, la planta empieza a estirarse, sacando un grupito de flores que por su forma es complicado que se autopolinicen.

Floración de Jovibarba

Las flores de forma estrellada, con seis pétalos son de color rojizo, anaranjado o rosado, a excepción de las especies de Jovibarba que tienes flores en forma de campana de color blanquecino.

Son monocárpicas, es decir, que cuando florecen mueren, dejando generalmente unos cuantos hijos, pequeñas rosetas laterales.

Algo que complica la identificación de las especies es que una misma planta cambia de aspecto en función de las condiciones climatológicas, la luz, el suelo y la época del año.
Además de lo anterior está el tema de la hibridación, algo que se produce en su hábitat natural y también de manera intencionada por los aficionados, creando cultivares variados de una misma especie que no difieren mucho entre ellos. Se dice que si una sempervivum se adquiere sin identificación nunca se podrá identificar por su aspecto.

El cuidado de estas plantas es sencillo ya que aguantan bajo condiciones bastante adversas, pero intentaremos mantenerlas de la mejor manera posible. Dependiendo de las condiciones climáticas de cada lugar adecuaremos el riego, pero usaremos un sustrato que permita el drenaje para evitar pudriciones de las raíces.

Sustrato

Aunque, como hemos comentado, son capaces de crecer en los tejados sin casi tierra, vamos a preparar un buen sustrato, que puede ser una mezcla 50-50% o 30-70%, orgánico-inorgánico. Como orgánico entre el 30 y 50%, puede usarse tierra, sustrato universal y humus de lombriz; como inorgánico, pomice, perlita, arlita y vermiculita. Si se plantan en maceta con agujeros en la base, preferiblemente de barro o cemento, pondremos una capa de piedras o arlita en la parte inferior para facilitar el drenaje. El riego dependerá mucho de la climatología pero siempre es mejor quedarse corto en el agua que pasarse. En cuanto a las temperaturas, pueden aguantar temperaturas bajo cero.

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